El riesgo de la distribución

Desde hace siglos, la cerveza sólo se producía a escala doméstica. No fue hasta 18th que el arte de elaborar cerveza se convirtió en un oficio internacional. Hoy en día existen largas redes de distribución que permiten a los cerveceros compartir sus creaciones a escala mundial. Estas largas redes encierran un riesgo potencial. Las condiciones que rodean la distribución de la cerveza no siempre son predecibles, lo que obliga a los cerveceros a tomar medidas exhaustivas para proteger el sabor, el color y el aroma de su cerveza durante la distribución. Pero, ¿cómo saben que estas medidas funcionan?

Brew Shield como antioxidante

El uso de una solución antioxidante es la forma más fiable de garantizar la eficacia de estas medidas. Brew Shield es un extracto natural de roble repleto de potentes antioxidantes que ayudan a preservar y proteger la estabilidad del sabor, el aroma y el color. La eficacia de esta solución puede comprobarse mediante un experimento de proceso en cuatro fases:

Fase 1:
Prepare muestras de prueba con Brew Shield

Fase 2:
Preparar muestras de control sin Brew Shield

Fase 3:
Almacenar la cerveza en condiciones desfavorables durante algunas semanas / meses

Fase 4:
Gusto por comparar la muestra de ensayo con la muestra de control

La prueba está en el pudín

Brew Shield se probó en el laboratorio líder en cerveza, VLB Berlín, mostrando los resultados de Brew Shield en relación con las condiciones de envejecimiento forzado (condiciones de distribución potencial). Se utilizaron señales de electrones para comprobar la velocidad de envejecimiento. Una vez concluido el experimento, los resultados de las pruebas de VLB Berlín demostraron la eficacia de Brew Shield como antioxidante en la conservación de la cerveza, lo que lo convierte en una gran solución para proteger la cerveza durante su distribución.

"La mayor sorpresa fueron las cajas que mantuvimos en la parte más caliente de nuestro almacén durante el verano. Después de tres meses a temperaturas superiores a 29 °C (85 °F), el lote con Brew Shield seguía siendo bebible, y se acercaba bastante al sabor original del envase, pero el que no lo llevaba era en gran medida una experiencia de 'ni siquiera termines el sorbo'." Mickail Murawski, antiguo Director de Producción de Mikkeller Brewing